La Iglesia de Tenaún, también conocida como Iglesia de Nuestra Señora del Patrocinio, es una joya arquitectónica situada en la localidad de Tenaún, en la comuna de Dalcahue, en la Región de Los Lagos, Chile. Este templo es una representación destacada del patrimonio cultural y religioso de la isla de Chiloé.

Iglesia de Tenaún
Imagen: Abriendomundo; https://www.flickr.com/photos/abriendomundo/

Formando parte de las 16 iglesias de madera de Chiloé, la Iglesia de Tenaún ha sido reconocida como Monumento Nacional de Chile y Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su construcción, realizada íntegramente en madera, refleja la santa patrona del templo, Nuestra Señora del Patrocinio, cuya festividad se celebra el 30 de enero​​.

La iglesia mide 42,40 metros de largo y 14 metros de ancho, con una altura de la nave central de 6,90 metros y una nave lateral de 4,30 metros. La torre más alta alcanza los 26,10 metros. Asentada sobre una base sólida de piedras y madera de coigüe, con una estructura compuesta por madera de tenío, tepa, y canelo. El revestimiento interior es de madera nativa de alerce, mientras que en el exterior se utilizó tejuelas de alerce y traslapo de ciprés de las Guaitecas y alerce. La techumbre es de fierro galvanizado en forma de planchas onduladas, un detalle que distingue a esta iglesia de otras en la región​​.

Ubicada al final de la plaza del pueblo en una posición diagonal única, la Iglesia de Tenaún resalta claramente desde el mar, este emplazamiento le otorga una monumentalidad especial, con 41 metros de largo por 14 metros de ancho y tres torres, su presencia en la comunidad es un testimonio de la cohesión, participación, solidaridad y compromiso de los habitantes de Chiloé con su patrimonio.

Este templo es un claro ejemplo de la escuela chilota de arquitectura religiosa, que se perfecciono a lo largo de casi cuatro siglos, logrando su forma madura en el siglo XIX​​.

La Iglesia de Tenaún no es solo un lugar de culto, sino un emblema de la historia, la cultura y la identidad de Chiloé. Representa la fusión de la tradición religiosa y arquitectónica de la región, siendo un destino imprescindible para aquellos que buscan experimentar la riqueza cultural y espiritual del Archipiélago de Chiloé.

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