El Flujo Lávico Challupén, ubicado en la comuna de Villarrica, es un testimonio viviente de la fuerza y la belleza de la naturaleza en la Región de la Araucanía, Chile. Este fenómeno natural es el resultado de la erupción del Volcán Villarrica en diciembre de 1971, una de las manifestaciones volcánicas más memorables de la historia reciente de Chile.
La lava, que se desplazó hacia el norte del Lago Calafquén y alcanzó el sector de Challupén durante el verano de 1972, ha dejado una marca indeleble en el paisaje, creando un ecosistema único donde la vida comienza a renacer sobre la roca volcánica.
Un Paisaje Resurgente
Hoy en día, el flujo lávico se caracteriza por su terreno cubierto de líquenes, que son los pioneros en colonizar la roca volcánica, representando uno de los primeros pasos en el proceso de sucesión ecológica que transforma la tierra arrasada en un ecosistema floreciente.
El área circundante, adornada con bosquetes nativos, incluye especies como lengas, coihues y araucarias, ofreciendo un contraste espectacular entre la devastación volcánica y la resiliente recuperación de la naturaleza.
Exploración y Aventura en Challupén
El Cerro Challupén y sus alrededores, incluidos los laguitos de Challupén y el zanjón Challupén, forman parte de un área de alto valor ambiental y escénico.
No obstante, esta zona, que se encuentra al sur del Volcán Villarrica, no está incorporada en el Parque Nacional Villarrica, pero ofrece rutas para el disfrute de los amantes de la naturaleza y la aventura.
Acceso y Recomendaciones
Para los visitantes que deseen explorar esta área única, es posible acceder desde Villarrica dirigiéndose hacia el sector Pino Huacho del Parque Nacional Villarrica. El acceso es libre y no se requiere permiso, aunque el estado del camino puede variar, especialmente durante el invierno o después de días lluviosos.
Es recomendable llevar suficiente agua, ya que encontrar fuentes durante la ruta puede ser desafiante.
El Flujo Lávico Challupén no solo es un destino para aquellos interesados en la geología y la ecología; también es un lugar perfecto para actividades al aire libre como caminatas, fotografía de paisajes y la observación de flora y fauna en un entorno de recuperación volcánica.
La belleza del área, complementada por la presencia de los laguitos de Challupén y el contraste entre la roca volcánica y los bosques nativos, hace de este lugar un destino imprescindible para los amantes de la naturaleza y aquellos que buscan experiencias únicas en el sur de Chile.