Enclavada en el corazón de la Araucanía, la Laguna Huinfiuca emerge como un refugio de serenidad y belleza natural, convirtiéndose en un destino imprescindible para los amantes del aire libre y la aventura. Situada a 24 km de Curarrehue y accesible a través del sector Puesco del Parque Nacional Villarrica, este espejo de agua se presenta como el epítome del encanto natural, donde las aguas de azul turquesa invitan a la contemplación y al disfrute.
El viaje hacia la laguna comienza en la ruta internacional Mamuil Malal, guiando a los aventureros a través de un paisaje adornado por la laguna Quillelhue, bosques de araucarias, quilas y coigües, hasta llegar a un sendero que se adentra en la esencia misma de la cordillera andina. Este trayecto no solo promete la vista del imponente volcán Lanín, sino que también ofrece la posibilidad de encontrarse con una familia de carpinteros negros, una experiencia que añade un valor único al viaje.
La caminata, que dura poco más de una hora, es accesible para principiantes, destacando por su terreno mayormente plano, salvo por algunas pequeñas subidas. Al final del camino, la laguna se revela rodeada de exuberante vegetación y cerros, con una delgada pero extensa playa que invita al descanso y al disfrute de las aguas frescas.
Además de ser un paraíso para los excursionistas, la Laguna Huinfiuca es el lugar perfecto para las familias que buscan una experiencia en la naturaleza que sea segura, cómoda y educativa. Equipado con todo lo necesario para una jornada al aire libre, incluye guías y monitores de actividades diseñadas para que los niños aprendan jugando, fortaleciendo los lazos familiares mientras se sumergen en el esplendor natural de la región.
La Laguna Huinfiuca no solo es un testimonio de la belleza paisajística de la Araucanía, sino también un ejemplo de cómo la naturaleza puede ser un aula viviente para personas de todas las edades. Su combinación de accesibilidad, belleza natural y oportunidades para la observación de la fauna la convierten en un destino destacado para quienes buscan experiencias auténticas en la naturaleza.
Este destino turístico, con su promesa de aventuras familiares y encuentros cercanos con la naturaleza, captura la esencia de la Araucanía y ofrece una escapada inolvidable para todos aquellos que desean explorar las maravillas naturales de Chile.