Enclavada en el corazón de la Araucanía, dentro de la comuna de Curarrehue, se encuentra una joya natural de inigualable belleza: la Laguna Careau. Este oasis artificial, creado al lado de un acantilado, se extiende sobre una superficie de media hectárea rodeada de una exuberante vegetación que pinta el entorno de diversos tonos de verde, convirtiéndola en el lugar perfecto para desconectarse de la rutina y sumergirse en la tranquilidad de la naturaleza.
La Laguna Careau ofrece una gama de actividades al aire libre para disfrutar solo, con amigos o en familia. Sus aguas cristalinas invitan a sumergirse en ellas, ya sea para un refrescante baño o para navegar en kayak, permitiendo así explorar cada rincón de este pequeño pero encantador espejo de agua. Para quienes prefieren mantenerse en tierra firme, el lugar cuenta con senderos que rodean la laguna, ideales para caminatas tranquilas o para encontrar el sitio perfecto para un picnic.
Pero la experiencia en Laguna Careau va más allá de sus aguas; el lugar cuenta con un mirador situado en la parte alta, desde donde se pueden admirar vistas panorámicas del entorno natural que rodea este rincón de paz. Además, siendo un espacio privado, el acceso está regulado mediante el cobro de entrada, asegurando así el mantenimiento y la exclusividad para quienes buscan un refugio en medio de la naturaleza.
Curarrehue, y en particular la Laguna Careau, se presenta como un destino que combina aventura, relajación y el contacto directo con la naturaleza. Esta comuna se distingue por preservar la cultura ancestral de sus habitantes, en su mayoría Mapuche-Pewenche, ofreciendo una experiencia de turismo que respeta y valora la Madre Tierra (Ñuke Mapu).
La propuesta de turismo en Curarrehue abarca no solo la belleza escénica de la Laguna Careau, sino también una inmersión en la riqueza cultural y natural de la región, ofreciendo actividades durante todo el año y adaptadas a todas las edades. Desde paseos en kayak hasta la exploración de senderos y el avistamiento de aves autóctonas, Laguna Careau es un punto de partida excepcional para descubrir los tesoros ocultos de la Araucanía.
Visitar la Laguna Careau es, sin duda, una experiencia enriquecedora que permite disfrutar de la serenidad del lugar, la calidez de su gente y la impresionante naturaleza de Curarrehue. Un destino obligado para quienes buscan conectar con la naturaleza de una manera profunda y significativa.