Situadas en la comuna de Puerto Varas, provincia de Payehue, y en la ribera nororiente del río Petrohue, las Termas de Ralún emergen como una joya escondida en el corazón de la Región de los Lagos; estas termas, que colindan con el Parque Nacional Vicente Pérez Rosales, ofrecen una experiencia de inmersión total en la naturaleza.

Termas de Ralún
Imagen: vicious; https://www.flickr.com/photos/yozy_vicious/

Lo que distingue a las Termas de Ralún es su ubicación privilegiada, rodeadas de una exuberante naturaleza y paisajes que parecen sacados de un cuento, al llegar, uno de los primeros encantos es el breve, pero impresionante paseo en bote para cruzar el río, una experiencia que, si bien es corta, queda grabada en la memoria por su belleza.

El complejo cuenta con pozones naturales de aguas termales, donde cada visitante tiene la curiosa posibilidad de cavar un poco para encontrar un mayor calor en el agua. Estos pozones, aunque no destacan por su estética, sí lo hacen por su temperatura y las propiedades terapéuticas de sus aguas. Es cierto que la presencia del azufre da al agua un olor peculiar, pero la experiencia de sumergirse en estas aguas tibias, con zonas más calientes, lo compensa con creces.

El acceso a las termas es de libre entrada, y la única tarifa es la del cruce en bote que cuesta unos $3500, una vez cruzado el río, un sendero de unos 10 minutos te lleva entre cascadas de agua pura y la naturaleza vibrante del río Petrohue hacia las termas; pero la experiencia no termina ahí, antes de llegar al cruce del río, existe un sector de camping pára el disfrute en familia en un ambiente rústico lleno de serenidad.

En resumen, las Termas de Ralún son una combinación de naturaleza, tradición y relax. Aunque no cuentan con lujos, su encanto radica en su autenticidad y en la riqueza del entorno natural que las rodea. Es un destino que invita a desconectarse y a vivir una experiencia genuina en el sur de Chile. ¡Un imperdible para amantes de la naturaleza!

 

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