El Lago Budi, ubicado en la comuna de Puerto Saavedra, a solo 85 kilómetros de Temuco, emerge como un destino que encanta y sorprende a sus visitantes. Este lago estuarino y salobre, conocido históricamente como Füzi en mapudungún, es un hermoso lago salado que se conecta con el mar, ofreciendo un ecosistema único de humedales y una rica biodiversidad, especialmente en avifauna.
Con una superficie de 56,2 km² y una profundidad máxima de 13 metros, el Lago Budi se presenta como un paisaje de inigualable belleza, donde la naturaleza y la cultura mapuche se entrelazan de manera armoniosa.
El Lago Budi no solo es famoso por su particularidad salobre, sino también por ser un refugio para diversas especies de aves, incluidos los majestuosos cisnes de cuello negro y las garzas, que se pueden observar en su entorno natural. Las islas que embellecen el lago, como Isla Huapi, Isla Conejo e Isla Guante, son verdaderos paraísos para los amantes del avistamiento de aves y ofrecen paisajes fotográficos inolvidables. La mezcla de aguas dulces y saladas crea un hábitat rico y variado que sustenta una asombrosa diversidad de flora y fauna.
La experiencia en el Lago Budi va más allá del disfrute de sus paisajes naturales; ofrece una profunda inmersión en la rica cultura mapuche. Los visitantes tienen la oportunidad de alojarse en rukas tradicionales, participar en la vida cotidiana de las comunidades locales y aprender sobre sus tradiciones ancestrales, como la confección de telares, una práctica artesanal que se ha transmitido de generación en generación. Esta interacción cultural brinda una comprensión más profunda de la cosmovisión mapuche y su estrecha relación con la tierra.
El Lago Budi no solo seduce a los visitantes con su belleza natural y cultural, sino que también ofrece una amplia gama de actividades. Desde paseos en bote y kayak hasta excursiones de senderismo y cabalgatas, hay opciones para todos los gustos.
Los más aventureros pueden explorar las islas del lago o participar en actividades de ecoturismo, como el avistamiento de aves. Además, la región alrededor del Lago Budi cuenta con restaurantes que ofrecen exquisita gastronomía local, alojamiento en cabañas y la posibilidad de disfrutar de las tradiciones y hospitalidad mapuche.
Aunque el clima en la región del Lago Budi es predominantemente oceánico templado lluvioso, con influencia mediterránea, es un destino que se puede disfrutar durante todo el año. Cada estación ofrece una perspectiva diferente del lago y sus alrededores, desde los vibrantes colores del verano hasta la serena belleza del invierno.
Se recomienda llevar ropa apta para la lluvia y efectivo en pesos chilenos, ya que en las zonas rurales puede ser difícil encontrar cajeros automáticos o establecimientos que acepten tarjetas.
El Lago Budi no es solo un lugar de extraordinaria belleza natural, sino también un espacio donde se vive y se respira la cultura mapuche. Es un testimonio vivo de la armonía entre el hombre y la naturaleza, ofreciendo a los visitantes una experiencia única e inolvidable en el corazón de la Araucanía.